Foto: de fuentes abiertas
Los Spathiphyllums requieren una atención especial en invierno para que florezcan en primavera.
Los spathiphyllums suelen plantarse en casa por su belleza y sus propiedades purificadoras del aire. Aunque la mayoría de las plantas de interior varían según la estación, los spathiphyllums, o como también se les conoce «lirios de la paz» o «felicidad de la dama», requieren cuidados especiales durante los meses de invierno. David Denyer, experto en flores y jardinería de Eflorist, declaró al sitio web Express que muchos propietarios cometen el mismo error al cuidar estas flores durante los meses de invierno. Es tan grave que puede provocar la muerte de la planta de interior.
«Como cualquier planta tropical, los spathiphyllums prefieren una temperatura cálida constante. Pueden ser especialmente sensibles a las fluctuaciones de temperatura, por lo que es importante adaptar sus cuidados a los cambios de estación. Uno de los mayores errores que puede cometer la gente al cuidarlas es colocarlas cerca de ventanas y rejillas de ventilación», dice el experto.
Según él, las corrientes de aire son muy perjudiciales para estas plantas de interior. Si se enfría durante mucho tiempo, puede marchitarse o incluso morir.
«Asimismo, los spathiphyllum no deben colocarse cerca de radiadores u otras fuentes de calor, ya que también pueden dañarlos», afirma.
Así que mantén esta planta alejada de cualquier fuente de calor o frío de la casa para mantenerlas sanas. También es importante intentar mantener una temperatura constante en el lugar donde crece la planta, lo que ayudará a que florezcan. Además, la flor aguantará un mes o incluso dos antes de empezar a secarse.
Estas plantas pueden florecer en primavera y otoño, así que no te asustes si no hay crecimiento durante los meses de invierno, ya que es la época del año en la que el crecimiento se ralentiza.
Sin embargo, hay medidas que puedes tomar en invierno para garantizar una floración más prolongada en primavera.
«La floración requiere mucha energía, así que es importante alimentar la planta a menudo y poco a poco durante la temporada de crecimiento. Utiliza un abono hidrosoluble equilibrado cada pocas semanas de abril a octubre», aconseja el experto.
En invierno, hay que reducir el abonado a una vez cada cuatro o seis semanas.
